miércoles, 3 de julio de 2019

El clan del oso cavernario


El clan del oso cavernario

Jean M. Auel

Inicio

La niña desnuda salió corriendo del cobertizo de cuero hacia la playa rocosa en el recodo del riachuelo. No se le ocurrió volver la vista atrás. Nada en su experiencia le daba razón alguna para poner en duda que el refugio y los que estaban dentro seguirían allí cuando regresara.

Nudo

Droog no sabía muy bien cómo explicar la tercera cualidad, aun cuando la comprendía visceralmente por el hecho de haber trabajado tanto tiempo la piedra. La cualidad que hacía posible su oficio era la manera en que se quebraba la piedra, y la homogeneidad del sílex constituía la diferencia.

Desenlace

Lo último que oyó Ayla al desaparecer detrás del saliente quebrado fue el gemido de Durc:
-          ¡Maamá, maaamá, maamaaá!

(Editorial océano de México, S.A.)

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